Paola Flores/Foto: Constanza Bravo

OAXACA, Oax. México y Chile coinciden en la nueva exposición de los fotógrafos Constanza Bravo y Javier Aravena. A través de sus trabajos: El exilio del río y La Africana, la historia detrás de dos ríos que confluyen y se contrastan.

Jorge Gronemeyer, curador de El devenir del río, como se llama la muestra en su conjunto, plantea en entrevista para Oaxaca Media, que este es un trabajo de denuncia, pero claramente no con una estructura fotoperiodística.

“En ambos casos las imágenes nos muestran problemáticas; sociales, humanitarias en el caso de Tijuana, ecológicas, en el caso del Mapocho, Chile. Develan la tensión que esos territorios específicos presentan.”, dice el artista chileno.

La serie fotográfica El exilio del río de Constanza nos muestra un paisaje, que en la medida en que se avanza, va pasando por la ciudad de Tijuana, hasta llegar a la tensión de la zona fronteriza.

El énfasis de su trabajo, abunda el curador, se concentra en un grupo de seres humanos (migrantes) que por diversas razones han tenido que buscar refugio en las riberas. Sus vidas e historias estancadas contrastan con la libertad del torrente del río.

Mientras en La Africana, Aravena cuenta la historia y condición de un paisaje alterado por el hombre (y la minería), el río Mapocho,  desprovisto de un cauce artificial, un espacio erosionado donde la naturaleza se resiste a desaparecer.

“Sus fotografías generan una tensión entre la materia orgánica y el residuo industrial, convirtiéndose en un gráfico testimonio del estado actual del lugar”.

Bravo y Aravena nos lanzan una interrogante, sostiene, Gronemeyer. Con su trabajo nos cuestionan como humanidad y sociedad.

[quote style=»boxed»]“¿Cómo es posible que seres humanos vivan en esas condiciones y por otro lado cómo podemos hacer un daño tan profundo a la naturaleza?”, apunta el artista y curador de estas exposiciones que se exhiben en la galería Resplandor, ubicada en la calle Constitución 100 en la ciudad de Oaxaca.[/quote]

A su parecer, son pocos quienes han presenciado realmente lo que ocurre en esos ríos y sus alrededores, pues las ciudades están pensadas para ocultarlos, los lugares no son de fácil acceso.

Además —dice— siempre atrás de estos desastres hay intereses económicos y políticos, alguien que está sacando provecho de todo esto. Por eso destacó es importante que el arte se haga cargo también de estos temas de forma crítica.

 

Reportera. Me gusta contar y escribir historias sobre temas de cultura: libros, árboles y comida.