Rocío Flores 

OAXACA, Oax. La producción de autoconsumo y otras labores comunitarias como los huertos  o aves de traspatio, son  una opción ante las prácticas desleales de comercios durante las crisis, como en esta epidemia, dice la delegada de la Procuraduría Federal del Consumidor  (Profeco) en Oaxaca Lourdes Santiago Cruz.

La contingencia  por el Covid-19 exhibió un comercio desleal y poco solidario, admite la funcionaria, quien recorre con personal de esa institución los comercios de la capital y otras regiones del estado para verificar los precios y la calidad de los productos.

“Trabajamos en visitar los establecimientos, tuvimos que realizar apercibimientos, multas, por quejas de productos caducos o para que no exista un aumento injustificado en los precios. No pueden subir de manera injustificada”, expone .

Frente a esta situación del alza de precios en productos básicos considera que en algunos pueblos y comunidades  de Oaxaca lo que ha permitido enfrentar este tipo de comercio y la prevención de una crisis mayor es la organización y la producción para el autoconsumo.

Hay prácticas ancestrales que todavía persisten y se puede ver en algunos hogares un chayotal, un limonar o la milpa, los huertos o las aves de traspatio. Actividades que en algún momento permitirían decir no a otros productos cuando se aceleran los precios, abunda.

Santiago Cruz hace énfasis en su función dentro de la institución para garantizar que los productos tengan un precio justo,  principalmente en los necesarios, pero también sugiere a quienes viven en las ciudades o en una dinámica urbana  y que no tienen la posibilidad de tener una tierra para sembrar, que se practique el consumo local pues eso permite un equilibrio comercial.

“Hay que alentar el consumo local, revalorar la producción porque es la dignidad de los pueblos y de las familias de Oaxaca”, dice.

Junto a la crisis de salud,  observa que este comercio desleal, que  impacta en el bolsillo de los consumidores, se dio más al inicio de la epidemia, y específicamente a finales del mes de marzo, al menos en este estado. 

Sin embargo –asegura– continúan verificando  los precios en los lugares donde se reportan quejas; aunque hoy en día algunas giran en torno a la cerveza, su prioridad en esta crisis está en regular los precios en los productos necesarios. En el precio del huevo, por ejemplo,  dice que los comercios no pueden tener una utilidad más allá del 7%. En todos los productos como el arroz, el frijol, debe haber una utilidad justa. Para la Profeco esto significa que no debe rebasar el 15 % respecto al precio que dan los productores. “Pedimos que nos justifiquen sus precios. En eso estamos trabajando. Incluso tuvimos que establecer acuerdos con algunos proveedores”, concluye.

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