Efrén Tavero Jara/

En una muestra más de cómo se manejan las cosas en Oaxaca,  Noticias y El Imparcial, los dos principales diarios del estado , decidieron acallar las exigencias de los miembros de la Orquesta Sinfónica de Oaxaca (OSO) sobre la renuncia de su director Javier García Vigil, sobre quien los integrantes de esta Sinfónica apuntaron las acusaciones de despótico, dictador, inepto e influyentista.

Noticias decidió echarle la culpa de todo el asunto a la Seculta, y El Imparcial de plano ni siquiera se dignó a publicar la nota.

García Vigil, quien siempre hace alarde de ser amigo de estos dos diarios y quien ha llevado a la Orquesta a sus sendos eventos de aniversario, probablemente solo tuvo que hacer dos llamadas para sepultar el asunto.

Si eso lo puede hacer el director de la orquesta del estado…hay que imaginarse que no harán los otros, los políticos oaxaqueños.

Esta no es la primera vez que García Vigil, con más de 22  años al frente de la OSO, da muestras de su soberbia, coincidieron algunos entrevistados, de su estilo de emperador romano, de su tráfico de influencias que lo solapa en la vida de Cesar que se da, donde los cuestionamientos son sinónimo de represalias, como al colaborador  al que casi logró que corrieran de su trabajo debido a que no le gustó el tono cuestionador de sus preguntas, las cuales básicamente iban por el mismo sendero de los recientes reclamos de los integrantes de la OSO.

Quienes en pleno ensayo de la orquesta citaron a una conferencia de prensa donde confrontaron  a su director, acusándolo de mala administración, repetidos atropellos  y mantener un coto de poder resultado del contubernio de impunidad que mantiene con la gerente administrativa Judith Rosas.

El hecho, con las pancartas exigiendo su salida, la música clásica sonando, los reporteros tomando fotos, Othón Tellez, subsecretario de planeación estratégica de la Seculta, con gesto de y ahora que hacemos, y García Vigil hablando sobre la belleza del arte y las margaritas, tratando de sacarse de la manga cualquier ridículo argumento con tal de aliviar un poco el enorme bochorno, fue de una genialidad que hacía pensar en una película de Fellini.

Lázaro Javier Hernández,  violista de la OSO y líder del movimiento de músicos inconformes recordó  la reciente presentación  que la orquesta realizó para el diputado local Martin Vásquez Villanueva y el historiador Enrique Krauze, a quien el diputado trajo a Oaxaca para dar una conferencia.

Improvisada, por decreto, exclusiva, la Orquesta Sinfónica de Oaxaca sirvió una vez más como caja de caprichos de un García Vigil que no conoce reparos a la hora de hacer valer su voluntad  y la de sus amigos,  que tampoco conocen el recato a la hora de hacer valer los deseos del amiguero director señalaron los protestantes.

Una cubierta para todos, una impunidad donde ya no se sabe quién le talla la espalda a quien, un «ahora por ti y mañana por todos», que rige buena parte de la vida pública de Oaxaca y del país.

Practica, que lamentablemente, el diarismo inherente en el periodismo oaxaqueño termina de apuntalar, con cargas de trabajo de cuatro notas diarias, en lo que lo importante ya no resulta ser lo que se reporta, sino el reportarlo lo más pronto posible con el llano objetivo de satisfacer una cuota.

Con notas mínimas de tres párrafos  donde uno se entera del suceso con la claridad de quien descifra un telegrama, y con datos levantados al vapor, con el “boletinazgo” como principal herramienta de trabajo.

En un trabajo como el periodismo, mal pagado, algo ingrato, en donde se tiene que trabajar hasta para cinco medios al mismo tiempo para poder completar para la renta, no es de extrañar que la pasión y el esmero en lo que se informa salga por la ventana cuando el hambre llega por la puerta.

Lo peligroso es que al final lo que vendrá para este círculo vicioso de indolencia, pobreza y hueva, será el rampante reinado de la más absoluta impunidad.

El amiguero Javier Garcia Vigil es buena prueba de ello.

 

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